Hospitales
Atendemos en varios Hospitales de la Red, para adaptarnos a sus necesidades.
Procedimientos
Procedimientos menores
Pueden ser realizados en la clínica, ya que contamos con el espacio adecuado y el instrumental completo
- Suturas
- Biopsias superficiales
- Resección de quistes o nevos
- Curación de heridas complicadas
- Atención del pie diabético
- Úlceras por decúbito
Diapositiva anterior
Diapositiva siguiente
Procedimientos mayores
Los cuales deben ser realizados en el ambiente intrahospitalario, tomando siempre todas las medidas necesarias, para asegurar el buen resultado.
La vesícula biliar es un pequeño órgano situado debajo del hígado, y su función principal es almacenar y liberar la bilis, un líquido producido por el hígado que ayuda en la digestión de las grasas. A continuación, se describen algunos síntomas comunes que podrían indicar problemas en la vesícula biliar y las razones que pueden llevar a la necesidad de extraerla, un procedimiento conocido como colecistectomía.
Síntomas de problemas en la vesícula biliar:
1. Dolor abdominal:
• El dolor es uno de los síntomas más característicos. Puede manifestarse en la parte superior derecha o en el centro del abdomen y generalmente ocurre después de comer alimentos ricos en grasas.
2. Dolor que irradia hacia la espalda o el hombro:
• El dolor de la vesícula biliar a menudo se irradia hacia la espalda o el hombro derecho.
3. Náuseas y vómitos:
• Las personas con problemas en la vesícula biliar pueden experimentar náuseas y, en ocasiones, vómitos.
4. Malestar después de comer:
• Los síntomas tienden a empeorar después de las comidas, especialmente después de ingerir alimentos grasos.
5. Flatulencia y distensión abdominal:
• Pueden presentarse gases y una sensación de hinchazón abdominal.
6. Cambios en los hábitos intestinales:
• Algunas personas experimentan cambios en los patrones de evacuación, como diarrea o heces grasosas.
Razones para la extracción de la vesícula biliar:
1. Cálculos biliares:
• La causa más común de problemas en la vesícula biliar son los cálculos biliares. Estos son depósitos sólidos que se forman en la bilis y pueden obstruir los conductos, causando dolor y otros síntomas.
2. Inflamación de la vesícula (colecistitis):
• La inflamación de la vesícula biliar, generalmente causada por cálculos biliares, puede llevar a infecciones y dolor intenso.
3. Pancreatitis biliar:
• Los cálculos biliares pueden bloquear los conductos pancreáticos, lo que lleva a la inflamación del páncreas.
4. Complicaciones graves:
• En algunos casos, los problemas en la vesícula biliar pueden llevar a complicaciones graves, como la perforación de la vesícula o la formación de abscesos.
La colecistectomía (extracción de la vesícula biliar) es a menudo recomendada cuando los síntomas son persistentes, recurrentes o están asociados con complicaciones. La extracción de la vesícula biliar no afecta significativamente la digestión, ya que el cuerpo puede adaptarse a la ausencia de este órgano.
Si experimentas síntomas que sugieren problemas en la vesícula biliar, es importante buscar la opinión de un profesional de la salud para un diagnóstico preciso y discutir las opciones de tratamiento adecuadas para tu situación.
La apendicitis aguda es una inflamación súbita y severa del apéndice, un pequeño órgano en forma de tubo que se encuentra unido al ciego, la primera parte del intestino grueso. Cuando el apéndice se inflama, generalmente debido a la obstrucción de su interior, puede causar dolor abdominal intenso y requiere tratamiento médico de emergencia.
Síntomas de la apendicitis aguda:
1. Dolor abdominal:
• El síntoma más común es un dolor que comienza alrededor del ombligo y se desplaza hacia la parte inferior derecha del abdomen.
2. Náuseas y vómitos:
• Muchas personas con apendicitis experimentan náuseas y, a veces, vómitos.
3. Fiebre:
• La fiebre es común y puede ser un indicador de infección.
4. Pérdida de apetito:
• La inflamación del apéndice puede llevar a una pérdida de apetito.
5. Sensibilidad abdominal:
• La presión sobre el área inflamada puede causar sensibilidad y dolor al tacto.
6. Cambios en los patrones intestinales:
• Algunas personas pueden experimentar cambios en los hábitos intestinales, como estreñimiento o diarrea.
Cirugía de apendicitis aguda:
El tratamiento estándar para la apendicitis aguda es la extirpación quirúrgica del apéndice, un procedimiento conocido como apendicectomía. La cirugía generalmente se realiza de forma urgente para evitar complicaciones graves, como la ruptura del apéndice.
Pasos típicos de la apendicectomía:
1. Evaluación y diagnóstico:
• Antes de la cirugía, se realiza una evaluación para confirmar el diagnóstico de apendicitis. Esto puede incluir exámenes físicos, análisis de sangre, y, en algunos casos, imágenes médicas como la tomografía computarizada.
2. Preparación para la cirugía:
• El paciente se prepara para la cirugía mediante ayuno y otras medidas estándar antes de una intervención quirúrgica.
3. Anestesia:
• La apendicectomía se realiza bajo anestesia general, lo que significa que el paciente estará completamente dormido durante el procedimiento.
4. Incisión o procedimiento laparoscópico:
• La cirugía puede realizarse a través de una incisión en el abdomen o utilizando técnicas laparoscópicas con pequeñas incisiones y una cámara. La elección entre estos métodos depende de varios factores, incluida la gravedad de la apendicitis y la preferencia del cirujano.
5. Extracción del apéndice:
• El apéndice inflamado se extirpa y se cierran las incisiones.
6. Recuperación:
• Después de la cirugía, el paciente es monitoreado en el hospital antes de ser dado de alta. La recuperación suele ser rápida, y la mayoría de las personas pueden regresar a sus actividades normales en poco tiempo.
La apendicectomía es una cirugía común y generalmente es efectiva en el tratamiento de la apendicitis aguda. Si se sospecha de apendicitis, es crucial buscar atención médica de inmediato, ya que la inflamación no tratada puede llevar a complicaciones graves como la perforación del apéndice.
Una hernia inguinal es una protrusión de tejido a través de una abertura en la pared muscular del abdomen en la región inguinal (ingle). Esta condición ocurre cuando una porción del intestino u otros tejidos intraabdominales sobresale a través de un área débil o desgarrada en la pared abdominal. Las hernias inguinales son más comunes en hombres, pero también pueden ocurrir en mujeres.
Causas de las hernias inguinales:
1. Debilidad muscular:
• La debilidad en los músculos de la pared abdominal puede permitir que los tejidos se protruyan.
2. Factores hereditarios:
• Algunas personas pueden tener una predisposición genética a desarrollar hernias.
3. Esfuerzo físico:
• Actividades que aumentan la presión abdominal, como levantar objetos pesados, pueden contribuir al desarrollo de hernias.
Síntomas de las hernias inguinales:
1. Protuberancia en la ingle:
• Una protuberancia o bulto en la ingle es uno de los síntomas más evidentes.
2. Dolor o molestias:
• Puede haber dolor o molestias en la zona de la hernia, especialmente al levantar objetos o realizar esfuerzos.
3. Sensación de pesadez en la ingle:
• Algunas personas experimentan una sensación de pesadez o tirantez en la ingle.
4. Dolor durante la tos o actividad física:
• El dolor puede intensificarse durante la tos, el estornudo o la actividad física.
Cirugía de hernia inguinal:
La cirugía es el tratamiento recomendado para todo tipo hernias inguinales, con la intención de evitar una lesión irreparable del intestino y el procedimiento más utilizado es la hernioplastia. Hay diferentes enfoques quirúrgicos, pero en general, la cirugía implica reparar la abertura en la pared abdominal y devolver los tejidos protruidos a su lugar adecuado. Aquí hay dos enfoques comunes:
1. Reparación abierta:
• En este enfoque, el cirujano hace una incisión en la ingle, coloca los tejidos protruidos nuevamente en su lugar y refuerza la pared abdominal con suturas o mallas.
2. Reparación laparoscópica:
• Utilizando instrumentos quirúrgicos pequeños y una cámara, el cirujano realiza pequeñas incisiones. Se introducen instrumentos a través de estas incisiones para reparar la hernia. La ventaja de la cirugía laparoscópica incluye una recuperación potencialmente más rápida y menos dolor.
La elección entre estos métodos depende de factores como el tamaño y la ubicación de la hernia, así como las preferencias del paciente y la experiencia del cirujano.
Es importante abordar las hernias inguinales, ya que si no se tratan, pueden causar complicaciones graves, como estrangulamiento, donde el suministro de sangre al tejido protruido se ve comprometido. Si tienes síntomas de hernia inguinal, es crucial buscar atención médica para obtener un diagnóstico preciso y discutir las opciones de tratamiento adecuadas.
La obstrucción intestinal es una condición médica en la cual hay un bloqueo parcial o completo del intestino, lo que impide el paso normal de los alimentos y los líquidos a través del tracto digestivo. Esta obstrucción puede ocurrir en cualquier parte del intestino delgado o del intestino grueso y puede ser causada por diversas razones, que incluyen:
- Adherencias intestinales: Son bandas de tejido fibroso que se forman entre los órganos abdominales después de una cirugía abdominal o debido a una inflamación crónica.
- Hernias: Cuando una porción del intestino sobresale a través de una debilidad en la pared abdominal, lo que puede provocar una obstrucción si se estrangula el flujo sanguíneo.
- Tumores: Los crecimientos anormales en el intestino pueden bloquear el paso de los alimentos y los líquidos.
- Divertículos: Estos son pequeñas bolsas que se forman en la pared del intestino y pueden atrapar partículas de alimentos y causar una obstrucción.
- Impactación fecal: Una acumulación excesiva de materia fecal puede obstruir el intestino.
Los síntomas de una obstrucción intestinal pueden incluir dolor abdominal, distensión abdominal, vómitos, estreñimiento o diarrea, incapacidad para eliminar gases, y en casos graves, fiebre y deshidratación.
El tratamiento de una obstrucción intestinal depende de la causa y de la gravedad de la obstrucción. En algunos casos, puede requerirse cirugía para eliminar el bloqueo y reparar cualquier daño en el intestino. En otros casos, se pueden usar métodos menos invasivos, como la colocación de un tubo nasogástrico para aliviar la presión en el intestino.
Es importante buscar atención médica inmediata si se experimentan síntomas de obstrucción intestinal, ya que puede ser una condición potencialmente grave que requiere tratamiento médico urgente.
La «enfermedad de la mama» es un término bastante amplio que puede referirse a una variedad de condiciones médicas que afectan a las mamas, también conocidas como senos o pechos. Aquí hay algunas de las condiciones más comunes relacionadas con la «enfermedad de la mama»:
- Cáncer de mama: Es una de las formas más comunes de cáncer entre las mujeres. Se produce cuando las células mamarias se multiplican de manera descontrolada, formando un tumor maligno. Los síntomas pueden incluir la presencia de un bulto en la mama, cambios en el tamaño o forma de la mama, enrojecimiento, hinchazón, secreción del pezón, y cambios en la piel de la mama.
- Mastitis: Es una inflamación de la mama que puede estar asociada con la lactancia materna, pero también puede ocurrir en mujeres que no están amamantando. Los síntomas pueden incluir enrojecimiento, hinchazón, sensibilidad y dolor en la mama, fiebre y fatiga.
- Fibroadenomas: Son tumores no cancerosos que se forman en el tejido mamario. Por lo general, son indoloros y se pueden mover fácilmente bajo la piel. A menudo se descubren durante un examen mamario de rutina.
- Quistes mamarios: Son sacos llenos de líquido que pueden desarrollarse en el tejido mamario. A menudo son benignos y pueden cambiar de tamaño con el ciclo menstrual. Los quistes mamarios a menudo no requieren tratamiento, pero pueden ser dolorosos y se pueden drenar si causan molestias.
- Mastalgia: También conocido como dolor mamario, puede ser causado por una variedad de factores, como cambios hormonales, quistes mamarios, mastitis o lesiones en la mama. El dolor mamario por lo general no es un signo de cáncer de mama, pero debe ser evaluado por un médico para descartar otras condiciones.
Es importante que las mujeres se realicen exámenes mamarios regulares y estén atentas a cualquier cambio en sus senos. Si se detecta un bulto o se experimenta cualquier síntoma preocupante en la mama, se debe buscar atención médica para una evaluación adecuada. El diagnóstico temprano es clave en el tratamiento exitoso de muchas enfermedades de la mama, incluido el cáncer de mama.
Las enfermedades gastrointestinales son afecciones que afectan el sistema digestivo, que incluye el esófago, el estómago, el intestino delgado, el intestino grueso (colon) y el recto. Estas enfermedades pueden ser causadas por una variedad de factores, que incluyen infecciones, inflamación, trastornos funcionales, trastornos estructurales y enfermedades autoinmunes. Algunas de las enfermedades gastrointestinales más comunes incluyen:
- Reflujo gastroesofágico (ERGE): Es una afección en la que el contenido del estómago regresa hacia el esófago, lo que puede provocar síntomas como acidez estomacal, regurgitación y dolor en el pecho.
- Úlcera péptica: Se caracteriza por lesiones en el revestimiento del estómago o del intestino delgado causadas por el ácido gástrico. Las úlceras pueden provocar dolor abdominal, acidez estomacal, náuseas y vómitos.
- Síndrome del intestino irritable (SII): Es un trastorno funcional del intestino que se caracteriza por dolor abdominal, distensión abdominal, cambios en los hábitos intestinales y malestar intestinal crónico.
- Enfermedad inflamatoria intestinal (EII): Incluye la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa, que son trastornos crónicos que causan inflamación y daño en el tracto gastrointestinal. Los síntomas incluyen diarrea, sangrado rectal, dolor abdominal y pérdida de peso.
- Diverticulitis: Ocurre cuando las bolsas llamadas divertículos en el colon se inflaman o infectan. Los síntomas incluyen dolor abdominal, sensibilidad en la parte inferior izquierda del abdomen, fiebre y cambios en los hábitos intestinales.
- Enfermedad celíaca: Es una enfermedad autoinmune en la que el consumo de gluten provoca daño en el revestimiento del intestino delgado. Los síntomas incluyen diarrea, dolor abdominal, distensión abdominal y fatiga.
- Cáncer gastrointestinal: Incluye cánceres que afectan cualquier parte del tracto gastrointestinal, como cáncer de esófago, estómago, colon y recto. Los síntomas pueden variar según la ubicación del cáncer, pero pueden incluir sangrado rectal, cambios en los hábitos intestinales, dolor abdominal y pérdida de peso inexplicable.
El tratamiento de las enfermedades gastrointestinales depende de la causa subyacente y puede incluir cambios en la dieta, medicamentos, terapia nutricional, intervenciones endoscópicas y, en algunos casos, cirugía. Es importante consultar a un médico si experimentas síntomas gastrointestinales persistentes o graves para recibir un diagnóstico y tratamiento adecuados.
Los tumores son masas anormales de tejido formadas por un crecimiento celular descontrolado. Pueden ser benignos o malignos (cancerosos). Los tumores benignos no se diseminan a otras partes del cuerpo y generalmente no representan una amenaza para la vida, aunque pueden causar problemas si crecen lo suficiente y ejercen presión sobre órganos circundantes. Por otro lado, los tumores malignos tienen el potencial de invadir tejidos circundantes y propagarse a otras partes del cuerpo, lo que los hace más peligrosos y potencialmente mortales. La detección temprana y el tratamiento adecuado son clave en la gestión de los tumores malignos.
Los tumores, en el contexto del cáncer, son masas de células que crecen de manera descontrolada y pueden invadir tejidos circundantes. Existen dos tipos principales de tumores:
- Tumores benignos: Son tumores que no son cancerosos. A menudo, tienen un crecimiento lento y no se diseminan a otras partes del cuerpo. Por lo general, no representan una amenaza para la vida, aunque pueden causar problemas si presionan órganos cercanos.
- Tumores malignos (cancerosos): Son tumores que tienen el potencial de invadir tejidos circundantes y propagarse a otras partes del cuerpo, un proceso conocido como metastasis. Esto los hace más peligrosos y potencialmente mortales. Los tumores malignos son el resultado de una transformación de células normales en células cancerosas.
